La otra feria abortada
La idea surgió de una conversación entre amigos. Comentábamos nuestras opiniones sobre el evento que organizara el gobierno en la Feria Ganadera. A muchos le indignaba el hecho de que se gastara una millonada en promover la figura del Presidente.Siempre hemos visto con respeto al Dr. Leonel Fernández por su talante. El Presidente representa sin dudas una transición desde los liderazgos caudillistas del siglo XX hacia la democracia de instituciones, por eso nos indignó más el hecho de que un grupo de aduladores quisiera poner su figura en relieve utilizando recursos estatales.
Propusimos la idea de organizar una actividad en respuesta y así surgió ‘La Otra Feria’, un evento que nos inventamos un grupo de muchachos de diversas universidades y de diferentes simpatías políticas expresas o no. El objetivo era hacer un contraste con la propaganda, con la realidad maquillada de los “diez años de modernidad y desarrollo”. Un evento de corte ciudadano, no político, donde cabían y caben todo tipo de personas.
El montaje duró dos semanas. Convocamos a la ciudadanía y las diferentes organizaciones de la sociedad para que presentaran sus visiones, su postura sobre la realidad dominicana en los diferentes aspectos y problemáticas. Diseñamos la forma, incluía charlas, dramas, arte, exposiciones, en fin, un espacio libre de expresión ciudadana y de denuncia de los problemas que aquejan diariamente al dominicano.
El sábado 26 de agosto nos dirigimos al parque Duarte, donde se realizaría el evento que habíamos notificado a Interior y Policía y el Ayuntamiento, como indica la ley. Nos encontramos con que el mismo estaba acordonado con agentes uniformados. Un contingente de casi cuarenta activos dirigidos por dos coroneles de la Policía habían tomado el lugar. Alegaron que no podíamos pisar las aceras de un parque público y detuvieron, tras una breve discusión sobre derechos ciudadanos y un empujón, a uno de los jóvenes organizadores. El coronel nos dijo que no podíamos hacer nada en el parque, que nadie podría pasar.
De inmediato nos dirigimos a los medios de comunicación a informarles lo que ocurría. Convocamos una rueda de prensa para denunciar el atropello y convocar la otra ‘Otra Feria’ para el 24 de septiembre, en memoria al golpe de Estado de 1963. Nunca creí que en el año 2006 y en un gobierno del partido de Bosch podrían impedirle a un grupo de jóvenes hacer una actividad tan sana y tan creativa como esta.
Bajo la lluvia, en la rueda de prensa, tras el canto del Himno Nacional, en un brote de fervor democrático, recordé las vejaciones a mi abuelo torturado en “La 40” y “El 9”(¿en vano?). De la nada, se me ocurrió empezar a cantar el himno del 14 de junio; al principio lo hice sólo, luego se sumaron algunas voces. ¡¿Hasta cuando?!
posted by José Carlos Nazario @ 12:01 PM
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